Después del anillo, el autor ha considerado adecuada la publicación de una foto que podríamos calificar de trascendental para la obra. Se trata, nada más y nada menos, que la lápida funeraria labrada con motivo de la muerte del que fuera prior del monasterio de Sant Pere de Rodes: Tassius.

En la Nota del Autor (pág. 7) se cita: "...y quién descienda a la cripta de la basílica del monasterio podrá acariciar la reproducción del anverso de la lápida funeraria dedicada a Tassius."

Y es que sobre Tassius pivota gran parte de la novela; ese Tassius, Tassis o también conocido por Tassiunco, fue el personaje histórico que impulsó la reconstrucción del monasterio; alguien lo suficientemente importante como para configurarse en protagonista del Libro II de la novela. No en vano, él y su hijo Hildesind fueron los que, desde el año 942, y por ocultas razones, mantuvieron en vilo las almas de los romanos pontífices. Eso es lo que, precisamente, y entre otros extremos, nos desvela Eugeni Verdú en su novela.

En el libro III, (págs. 234 y s.s.), y ya en época actual, Álex, el protagonista, consigue completar, gracias a la ayuda de antiguos textos, la inscripción que aquí se ilustra. Tal y como puede advertirse en la imagen, sólo existen dos fragmentos de la lápida primitiva -ángulo derecho-. El resto del texto solo ha podido conocerse gracias a las crónicas que el autor -de la mano del protagonista- rescata del pasado y que datan de 1606.

....pero es el reverso de esa lápida (págs. 242 y s.s.) lo que pondrá al protagonista sobre la pista de lo que realmente esconde el monasterio de Sant Pere de Rodes.....